John Carpenter´s Cigarette Burns
Mi primer encuentro con el BAFICI no fue de lo más feliz en más de un sentido. Más allá de los previsibles quilombos de organización, el público en su postura culturosa decadente y el hecho de tener que ir al cine de un shopping, la posibilidad de ver algo nuevo de John Carpenter logró hacerme pasar por alto todo esto.
Casi.
Porque no tuve en cuenta la posibilidad de que en vez de una película me estuvieran vendiendo un capítulo de una serie de televisión que con un poco de suerte será posible ver en I-Sat de acá a unos meses, o conseguirla en dvd, o en su defecto también sería una buena opción pasar más de un episodio en vez de optar por la opción mercantilista de "si querés más, venite otro día".
Por ahora gana en todo esto la gente de Mar del Plata.
Más allá del primer mal sabor de boca, me senté para escuchar los acordes familiares de la música de Carpenter (hijo en este caso, todo en familia) y asomarme al mundo conocido de un director peculiar. El tipo se las ha ingeniado para filmar temáticas que le interesan, mayoritariamente terror/horror, bichos de toda calaña, monstruos varios, etc, y siempre lograr meter un poco de contenido detrás de la aparente temática pochoclera de bajo presupuesto. Eso hasta la desagradable "Fantasmas de Marte" de la que no voy a hablar ahora. Y por supuesto la desastrosa "Cigarette Burns".
Las quemaduras de cigarrillos son una marca circular que aparece en la pantalla una fracción de segundo arriba a la derecha, que servían de señal para el proyectorista para el cambio de rollo. Recuerdese "El club de la pelea" y las incisiones que el infame Tyler Durden hacía en los rollos valiendose de esa fracción.
A partír de ésta señal se desarrolla la historia de Kirby Sweetman (qué nombre por dios), a cargo de un cine donde proyecta clásicos, dueño de una actitud de film noir y con una capacidad particular para rastrear películas raras. Kirby es conectado por un millonario coleccionista llamado Ballinger (Udo Kier) quien le encarga encontrar la extraña "Le fin absolue du monde", o bien "El fin absoluto del mundo", film que posee la extraña cualidad de provocar violentos baños de sangre entre la gente que la ve.
Empezamos mal.
Kirby a pesar de encontrarse desde el principio con que el extraño Ballinger tiene una criatura encadenada, muy posiblemente un ángel, no duda en salir en la búsqueda del film maldito ya que se encuentra endeudado. Aún sabiendo que su empleador planea proyectar masivamente la película.
Al entrar en contacto con una entrevista del director del film, Kirby comienza a alucinar con círculos luminosos (las quemaduras de cigarrillo) y fantasmas del pasado.
Error número dos.
Así la historia prosigue con la búsqueda, la supuesta profundización de los personajes, las alucinaciones en aumento con ciertos momentos gore que no vienen muy al caso y finaliza con el encuentro del film, su proyección y un pequeño baño de sangre, redenciones con el pasado y la liberación del ángel torturado.
Lo que desde el principio no funciona con ésto es achacable a los poco éticos guionistas novatos Drew McWeeny y Scott Swan quienes demuestran claramente dónde está la línea que divide el homenaje del plagio descarado. Esta historia que prentende ser un tributo al cine de suspenso y de terror termina siendo nada más que un monstruo tipo Frankenstein donde gran parte de sus miembros son de la fantástica "En la boca del miedo" del mismo Carpenter (en la que se cuenta la búsqueda de un libro cuya lectura desata la violencia y la locura), el detective cinéfilo es un Dean Corso wannabe extraído de "La última puerta" de Roman Polanski (donde a un especialista en libros raros se le encarga la búsqueda de un libro que resulta escrito por el diablo) y el recurso de los círculos flameantes esta burdamente robado de "Ringu" (o si quieren su remake yanqui "La llamada", donde un video maldito produce la muerte de quien lo vea, pasando por varias alucinaciones espantosas de un círculo misterioso y un fantasma vengativo). Hasta el personaje hiper secundario del proyectorista del cine de Kirby está desagradablemente robado del Hurley de la serie "Lost".
Cómo Capenter accedió a filmar ésta porqueria mal actuada y peor escrita, escapa un poco mi imaginación.
Salvo por el hecho de que todos tenemos que comer.
Y de que algunos evidentemente no saben retener su dignidad.
Conclusión: Una porquería indignante
sábado, abril 15, 2006
BAFICI
Publicadas por Anita a la/s 2:46 p. m. |
sábado, abril 01, 2006
Festival de cine de Mardel
Legión (Tribus Urbanas Motorizadas)
A toda
El director de este documental, Jósé C. Campusano se ha propuesto hacer cine bruto. O lo que se entiende un documental que está en algún lugar a medio camino entre el Dogma de Lars Von Triers y una mínima edición.
Legión es un documental sobre los motoqueros que pueblan la fauna del GBA. Cuenta las vicisitudes de la AMB (Asociación Motoquera de Berazategui) y de otras en su sociabilidad y organización interna. Destacan las figuras de "El Polaco" y "el Vikingo" que nos reconcilian con el adolescente que todos llevamos dentros.
Si cine bruto debe entenderse como edición desprolija, tiempos corridos y excesivo naturalismo, la muy buena musicalización con temas de AC/DC, Creedence Clearwater Revival y Pappo, entre otros, suma una nota discordante. Pero con todo el film se deja querer así como estos motoqueros exhuberantes y familieros que retrata.
Born to be...Naturalista
Laas Chicassss….
Hotel Gondolín es un refugio. Es un lugar dirigido por una travesti que busca dar techo a sus compañeras trabajadoras sexuales y organizarlas. Es un documental que recorre en plano intimista tanto el día a día de su dura profesión y su lucha contra el rechazo como el activismo político.
Este documental, en manos del experimentado López Escrivá es una impecable mirada sobre un mundo tan complejo como segregado. Los planos cortos de un hotel en pobres condiciones edilicias contrastan con primerísimos planos de los rostros de sus habitantes y secuencias de ellas "produciéndose". Un hábil recurso que combina intimidad, imagen y discurso. El film lo logra en muy buena medida disparando el debate sobre las mínimas condiciones de lo que llamamos normalidad y el problema del respeto a la diferencia. El mundo interno privado es planteado ni bien empieza el film con el relato de vida de sus ocupantes y va ganando en exterioridad hasta llegar al mundo público en el debate que tuvo lugar en el teatro Ateneo acerca de la modificación del Código de Convivencia en la Ciudad de Buenos Aires. Un trabajo impecable. He dicho.
Conclusión: Transeúnte de Bs. As. , visite este Hotel
Conductas y condicionantes del comportamiento grupal
Este pequeño y simpático documental busca indagar cuáles son los principales determinantes de la conducta de un individuo cuando está en masa, no sin antes tratar de explicar qué es una masa de gente. El documental se divide tanto en el repaso con una audaz edición de las principales teorías de la psicología social desde Le Bon como en una serie de experimentos científicos conducidos principalmente por un tal Juan Pérez.
Dinámico y llevadero, con una edición impecable y audaz y con un lenguaje claro y ameno, este documental es sumamente didáctico y entretenido. Una joya, pero de fantasía. Falta una profunda indagación de teorías más dinámicas y aspecto más profundos del tema que se plantea. Igual vale la pena. He dicho
Conclusión: las aventuras de Juan Pérez, o de nosotros en la masa.
TV Service
Pero que imagen, señora!!
Juan Palomino interpreta un técnico de TV que vive en una Villa de Lugano y que provoca un accidente eléctrico para que la gente lo llame y le pida reparar su TV. Pero hay más. Su plan es interrumpir la señal, justo durante un River -Boca, para declarar su amor a una chica que conoció cuando tomó su primera comunión.
Una trama sencilla, pero correcta. Un Palomino sobrio, pero eficaz. Y un muy buen corto con un recurso de edición notable. El resto de los actores que compone la trama fueron reclutados en la misma villa de Lugano. Antes de la aparición de cada uno se muestran los diferentes casting. Un recurso simple e ingenioso que da a este corto un gran valor y lo hace muy recomendable
Conclusión: Señoras y señores, tengan Uds. muy buena imagen.
Subamérica
Subdesarrollo cinematográfico
Un geógrafo (o docente de geografía, no se sabe muy bien) es abandonado por su novia (esposa, mina, ¿a quien le importa?) e inicia un viaje para buscarla y al ser rechazado de nuevo (que poco nos importa, no?) va con una prostituta (una actriz cuyos gemidos "profesionales" no convencen a nadie) e inician juntos un viaje (¿iniciático?, ¿una caída? ¿una excusa para torturar al espectador casi dos horas? "nota de Anita: la cosa duró con suerte una hora, pero se siente como tres") Siguen los interrogantes, pero el que más le llega al espectador es ¿qué demonios hago yo acá?.
Este film fue puesto en circulación en el Festival y para colmo seleccionado. Una de las peores impresiones sobre celuloide que puedan jamás hacerse. BJ puede masticar una lata de fílmico y escupir algo mejor. Pocas tomas que duran eternidades y cansan al espectador, cuando no robos descarados al último de film de Kiorastami y algún intento de evocar personajes al mejor estilo Vargas Llosa como el "loco" director del mundo. Es tan mala que el espectador no puede ni reírse de ello.
Ha llegado un punto en que en las escuelas de cine debe enseñarse que lento no es igual a profundo ni que el mensaje debe sustituir a la trama. BJ ha sido estafado y quiere que alguien le devuelva las casi dos horas de su vida que ha perdido ahí dentro.
Conclusión: Se informa a la población que este film ha sido clausurado por razones sanitarias.
Zulú love letter
Sudáfrica mía
Esta es la historia de una periodista que lucha por el castigo de los crímenes raciales durante el Apartheid en Sudáfrica. Y desde luego, su vida familiar y afectiva sufre por su constante dedicación así como recibe planteos en el ámbito profesional.
Hasta aquí, una trama que podría dar lugar a un típico film de "Cine sólo para mujeres" en alguna matinée de Cosmopolitan TV con esos típicos golpe de efecto como la música sensibilizadora cuando al fin se hace justicia. Nada de esto se encontrará aquí. Al contrario el film demuestra una enorme sutileza. Una voz oculta que susurra al espectador pero que no alcanza a decirle algo que pueda entender. Es la voz negada, la voz del otro Negro que tan bien retrata el ganador del premio Nobel de Literatura J.M. Coetzee en su novela "Foe". Y también puede citarse la Edad de Hierro, dado que es el mismo sentido de proceso abierto y sentidos negados los que recorren este film. Inclusive los diálogos de Shakespeare que rodean al supuesto villano contribuyen a ese sentido de extrañamiento de la protagonista de la Edad de Hierro.
Una obra de arte, una obra algo críptica pero recubierta de un lenguaje cinematográfico accesible a todos. Despierta las ganas de estudiar este complejo proceso de la Sudáfrica post Apartheid y la problemática del otro. He dicho.
Conclusión: la voz de Viernes
Publicadas por Anónimo a la/s 1:36 p. m. |