sábado, octubre 29, 2005

El Aura


Momentos borgianos.

Esteban Espinosa ( Ricardo Darín) un epiléptico taxidermista con la obsesión de cometer un robo y con su vida matrimonial hecha pedazos es invitado por otro taxidermista amigo a cazar ciervos al Sur. La esposa de un tal Dietrich (Dolores Fonzi) los recibe en sus cabañas. El inexperto Espinosa mata a Dietrich por accidente en el bosque. Su amigo golpeador de mujeres (Alejandro Awada) debe regresar con urgencia a Bs. As. Dos matones llegan buscando a Dietrich. Primer momento tenso. Espinosa decide hacerse pasar por amigo de Dietrich y junto con ellos y el hermano de la esposa de Dietrich planean el robo a un casino.
El aclamado director de Nueve Reinas , Fabián Bielinsky vuelve al ruedo con un policial escrito por él. Al igual que en su antecesores se apoya en la densidad de sus guiones, en las vueltas complejas y múltiples de sus tramas y en elementos simbólicos cada vez más fuertes. Dos ideas rectoras le dan consistencia a este film. Una de ellas es la idea de aura no sólo como un momento clave de todo ataque epiléptico sino como un instante de cambio en que puede vislumbrar el paso en silencio del universo. Con un sentido muy borgiano que también le da una visión laberíntica. El aura es circular. La película es circular. El instante es eterno. Tan eterno como la duración del film.
La otra idea es el aura como ese elemento invisible que nos acompaña y nos define. Como una sombra de perro-lobo que acompaña al protagonista. Como la sombra de cuchillero de Borges.
Notable trama simbólica que se apoya en recursos y lenguaje básicos pero efectivos. Vale la pena este Aleph cinematográfico. He dicho.

Conclusión: Un momento tenso e intrigante