viernes, mayo 13, 2005

Conociendo a Julia (Being Julia)



Las vicisitudes de la señora Lambert

Ser Julia no es facil. Ella misma no sabe quién es.
Como actriz, es la diva principal de la escena teatral de Londres, a fines de la década del ´30. Como esposa, es la otra mitad de una pareja autodefinida como "moderna" donde la compañía es más profesional que real y las infidelidades se admiten pero en el fondo no se toleran. Como madre, sufre del principio del nido vacío al darse cuenta de que su hijo ya no la necesita tanto como cuando era más pequeño. Como amante, es la típica mujer con crisis de mediana edad que se refugia en un ventiañero, aunque puede verse venir el desastre, y no le importa. O se convence a sí misma de que no importa porque Julia es, más que nada y en el fondo de todo, actriz. Así, en cada rol (en cada Julia) irá poniendose diferentes mascaras, de comedia o tragedia según la ocasión, y se perderá entre sus diversoso papeles. Lo que se encuentra detrás de una seguidilla de actuaciones muy buenas a cargo de Anette Bening (Julia Lambert) y Jeremy Irons (Michael Gosselyn), y de una impecable reconstrucción de época, es una reflección interesante acerca del oficio del actor, y el oficio de ser mujer en un mundo de hombre, no en el sentido trillado de la frase sino literalmente. Julia es y se define a partir de su relación con los hombres, siendo la más significativa, la que tiene con su difunto profesor de actuación Jimmie Langton (Michael Gambon), quien se le aparece en momentos claves, no como fantasma, sino como reflejo de su propia mente, un autentico superyo encargado de criticar sus reacciones y sus actuaciones.
Las metáforas sobre el teatro no faltan, sin embargo dado mi pobre conocimiento, no profundizaré sobre ello.
Por lo demás la pelicula posee un ritmo agradable, se deja ver y acompaña a Julia en su universo de multiples papeles, en las tablas y en la vida.

Conclusión: Edípica