Por ser políticamente correcto….
W. Kandinsky en su libro acerca del arte sostenía que las obras de arte cobraban vida propia y se separan de su autor y sus intenciones originales. Esto quiere decir que las interpretaciones de las obras varían, pero no son infinitas. Este libro de Kandinsky no figura en la biblioteca del director Michael Radford y “El mercader de Venecia”, adaptación de la obra del mítico W. Shakespeare, es prueba de ello.
Antonio (Jeremy Irons) rico mercader de la ciudad de las góndolas, acepta financiar una loca expedición casamentera de su amigo Bassanio (Joseph Fiennes) y para eso pide una suma prestada a un prestamista judío llamado Shylok (Al Pacino). Este, cansado de los maltratos y discriminaciones que sufrían los judíos en esa época, accede a prestar el dinero bajo extrañas condiciones: no cobrará intereses, pero si Antonio no puede devolver el dinero pronto, tendrá una libra de su carne. Shakespeare ha sido muchas veces adaptado al cine, algunas versiones fueron más afortunadas que otras. Esta es probablemente una de las peores, cuanto error se puedan imaginar ha ocurrido aquí.
En primer lugar, Bradford parece que elige quedar bien con la colectividad judía y acentúa la discriminación y las persecuciones. Es un giro interesante pero imposible con el guión original de Shakespeare. Mutila al personaje de Shylock, no deja ver el conjunto de tramoyas que lo van a empujando a ser el personaje repelente y mezquino que es y el resultado es un injerto inicial que desvirtúa toda la trama. El giro de la adaptación es tan burdo que el guionista y director (para colmo es el mismo) no elimina las escenas que hacen incoherente la trama! ¿Era Shakespeare antisemita? Es una larga discusión, pera esta no era una obra que buscará redimir en algún sentido a los judíos. No todos los sentidos son posibles como decía Kandisnky
Bradford continúa con sus errores de adaptación. El teatro isabelino se sabe tiene un ritmo diferente y las adaptaciones tienden a recortar los diálogos. Hay extremos como transformar a Romeo en un pandillero latino o las hiperfieles adaptaciones de Kenneth Branagh que duermen al auditorio no preparado. Bradford inaugura un nuevo modelo: el recorte indiscriminado. Se recortan algunos diálogos, y luego inexplicablemente los personajes se sumergen en tremendos monólogos que siguen el ritmo shakespeareano. El resultado es tétrico. ¿Ritmo cinematográfico? ¿Y eso que és?
Bradford tampoco saca el jugo de sus actores y las performances son irregulares. Al Pacino y Irons están, a lo sumo, correctos (conocen mucho su oficio). Interesantes revelaciones en los personajes femeninos de Portia (Lynn Collins) y Jessica (Zuleihka Robinson) y el resto, con Fiennes a la cabeza, son bien olvidables.
Utilicemos un poco más al pobre William para cerrar, alentándolos a que partan pronto y relaten las tristes nuevas pues no ha habido adaptación más triste que es la de Michael Bradford y sus desdichado mercader de Venecia.
Conclusión: Algo huele podrido en Venecia
lunes, diciembre 19, 2005
El mercader de Venecia
Publicadas por Anónimo a la/s 11:34 a. m. |
jueves, diciembre 01, 2005
Virgen a los cuarenta
La cosa esta dura.
Joven espectador, si Ud tuviera 40 años o simplemente hubiera pasado los 35 es probable que su despertar estuviera signado por una adolescencia en que pudo ver joyas cinematográficas como Porky o La Venganza de los Nerds, en las que no sólo descubre el cuerpo femenino sino que se hace familiar con ese tipo de comedia. El nuevo milenio le traerá American Pie y verá con condescendencia la situación del pobre Jim. Y si para esa altura aún no pinchó el globo es fácil adivinar como se sentirá: al palo.
Así se despierta el protagonista de nuestra historia, Andy Stitzer (Steve Carell) quien es un pobre empleado de un local de electrónica que sufre la burla de sus amigos (y las insinuaciones de su única y espantosa colega mujer, la cual tiene las compuertas bien abiertas) y que como el título del film lo indica a sus 40 años aún no logró enterrar el huesito.
El resto de la trama es previsible. Sus amigos tratarán de ayudarlo a superar su timidez y dar el gran debut pero terminarán por embarrar más las cosas. Nuestro protagonista conocerá a Trish (Catherine Keener), una mujer de muy pasados los treinta, con tres hijos y que vende cosas por internet. El deberá decidir si ordenar servicio completo con ella, de quien esta enamorado, o con Beth ( Elizabeth Banks) una ninfeta de cuidado. Pero por previsible no será menos divertido.
Una comedia al estilo American Pie con la virtud de conocer a su público. Tiene humor y muchos chistes escatológicos pero puede captar tanto adolescentes como jóvenes y adultos. El guión muestra un conocimiento fino y detallado de muchos mitos en torno a la virilidad masculina y la actividad sexual. Hay actuaciones más que satisfactorias y una dirección clásica pero eficaz, ideal para ir al cine con amigos y/o con novias y/o amigas de mente abierta. Recomendable para una noche de viernes tarde con amigotes, birras y pizzas.
Conclusión: Risas Vírgenes.
Publicadas por Anónimo a la/s 9:30 p. m. |
lunes, noviembre 28, 2005
Harry Potter y el Cáliz de Fuego (Harry Potter and the Goblet of Fire)
Cuartas partes nunca fueron buenas.
¿Qué tienen en común la última película de Harry Potter y "Las dos Torres", segunda parte de la trilogía de "El Señor de los Anillos" de Peter Jakson?. Las dos son terriblemente largas, las dos están basadas en libros con demasiada información para adaptar, y las dos incluyen escenas alargadas innecesariamente, escenas inventadas que no aportan nada y situaciones forzadas que no terminan de cerrar el conjunto.
"El Cáliz de Fuego" inicia con un misterioso asesinato y la llegada del trío protagonista, Harry Potter, Ron Weasley y Hermione Granger al torneo mundial de Quidditch. Durante las celebraciones del campeonato, aparecen los seguidores de Lord Voldemort y su marca aparece en el cielo. Más tarde, ya en la escuela, se anuncia el torneo de los tres magos donde a pesar de un límite de edad estricto, Harry Potter termina participando. Y a partír de ahí hay dragones, sirenas, laberintos fantasmales, angustias amorosas adolescentes, coscorrones de profesores estrictos y una lucha cara a cara entre enemigos mortales.
La película sufre de varios errores que no la ayudan a llegar a buen puerto. En el intento por adaptar una obra difícil algunas decisiones resultan acertadas, pero la mayoría no logra sacar el producto adelante. La resolución del misterio central de la trama está bien resumido, quitando personajes que no agregan nada a los tiempos cinematográficos y logrando una línea argumental clara de seguir. Por el otro lado los personajes centrales están, en algunas situaciones, delimitados y se vuelven caricaturas de sus reacciones, como las muletillas de Ron (cuántas veces puede decir "bloody hell"?) y los arranques de angustia neurótica de Hermione, más las dos líneas que tienen en toda la película los personajes secundarios como Fleur o Krum, que casi no se entienden qué hacen ahí o por qué tienen tanta importancia en los productos promocionales si casi no hablan. La dirección de Mike Newell, conocido por "Cuatro bodas y un funeral" y la empalagosa "La sonrisa de Mona Lisa", es correcta en el mejor de los casos pero desastrosa en la dirección actoral, sin importar la larga trayectoria de algunos y la poca experiencia de otros, todos parecen estar perdidos. Al final resulta un casting extraño, una seguidilla de momentos de relativa tensión, toques de humor que vuelven todo un poco más llevadero y extrañas decisiones que resultan en pequeñas indigestiones. Yo recomendaría recuperar a Alfonso Cuaron (director de " Y tu mamá también" y "Harry Potter y el prisionero de Azkaban"), que sin ser inglés ni dedicado a comedias romanticas pasatistas logró hacer la versión más equilibrada de las cuatro adaptaciones.
Conclusión: Un buen ejemplo de cuando el "fanservice" sale mal.
Publicadas por Anita a la/s 1:32 p. m. |
martes, noviembre 22, 2005
Una historia violenta (A history of violence)
Atacando estereotipos norteamericanos
En este tipo de obras es donde más se puede ver la tremenda distancia entre los promedios, es decir, entre el crítico promedio y el espectador promedio. Coonsiderada ya por la masa culturosa como una de las mejores películas de Cronenberg, nos acerca a la familia Stall, aparente y típica hasta el hartazgo familia norteamericana, reflejo de todo lo que es bueno y "debería ser". Papá es bueno, dueño de un "diner" y pacífico. Mamá también es buena y trabaja aparentemente de fiscal. El hijo mayor es un adolescente promedio con todas las inseguridades aparentes y cierta tendencia mágico-hollywoodense a que las cosas le salgan bien cuando todo indica lo contrario. Y está la nena rubia y buena, como el resto de la familia, quien se despierta en el medio de la noche porque sueña con monstruos. Pero "los monstruos no existen" dice papá.
Los monstruos por supuesto que existen, sino no habría película. Aparecen en principio en la piel de dos ladrones hiper violentos que en su camino de maldades deciden parar en el buen diner del buen Tom Stall.. y cuando las cosas se ponen agrias Tom se los despacha con una habilidad imposible. Sigue un pequeño circo mediatico que lo único que logra es poner la cara de Tom en todas las televisiones, y a partir de ahí, el viaje es cuesta abajo. Atraídos por la información, se presentan en el pueblo unos mafiosos con cara de malos y peores intenciones, convencidos de que Tom es otra persona. Y entonces los acontecimientos se precipitan, la violencia engendra violencia (por supuesto) y las crisis de identidad se suceden.
Las metáforas están, el juego de géneros también, pero ¿qué pasa con la audiencia quien en su mayoría es ajena a éstos?. A favor de Cronenberg, logra risas incómodas y que, mal que mal, la gente se vea obligada a identificarse con un héroe que no es lo que aparenta. Los climas de tensión están bien logrados, pero la falla primordial está ahí, asomando: nadie compró la historia. Si bien el juego de géneros es totalmente lícito, la sacarinada idealización inicial de la familia Stall los vuelve casi de cartón, la identificación necesaria para llevar al espectador a lo largo del viaje incómodo no se logra totalmente.. y el resultado es que el espectador promedio sale del cine con la sensación de que lo estafaron. Lamento ser repetitiva, pero insisto en que la verdadera genialidad es lograr un producto profundo y metafórico, sin dejar totalmente de lado al espectador promedio. Es fácil caer en un producto cerrado para un elite entendida, o simplemente un entretenimiento vacío y pochoclero. Los extremos no son buenos y el mundo está lleno de buenas intenciones.
Conclusión: Mucho ruido y nueces para unos pocos
Publicadas por Anita a la/s 1:06 p. m. |
domingo, noviembre 13, 2005
Millones (Millions)
Un cuento de Navidad.
Hace un tiempo, y pueden verlo en este blog, Anita llamaba la atención sobre la vuelta a los 50. Grandes directores y guionistas intentaron rescatar y hacer films con esa ternura. Esta vez fue el turno de Danny Boyle, el genial director rupturista que practicamente creo un nuevo lenguaje cinematográfico con films como Tumbas al Ras de la Tierra y la inolvidable Trainspotting.
Millions nos presenta a la clásica wretched family de los 50: Papá (James Nesbitt), sus dos hijos varones y su mamá trágicamente desaparecida. El mayor de los varones, Anthony (Lewsi Owen McGibbon) es uno de esos hiperpedantes chicos que asombran con su conocimiento inconexo de la realidad financiera internacional; el menor, Damian (Alexander Nathan Ethel) manifiesta una temprana fe religiosa, siendo capaz de recordar las fechas y circunstancias del nacimiento y muerte de diversos santos. Tras la muerte de su madre deciden mudarse y el pequeño Damian arma "su" casa junto a las vias con unas cajas. Allí recibe, como regalo del cielo, una valija con millones de libras, sólo comparte el secreto con su hermano, quien quiere usarlo para una serie de inversiones estratégicas en bienes raices y bonos. Damian por su parte quiere ayudar a los pobres. Así potencia el encuentro entre su padre y Dorothy (Daisy Donovan), una chica que junta dinero para ayudar a los niños africanos. Como era previsible el dinero era en realidad robado y el ladrón viene a reclamarlo.
La película debe ser sintetizada como un arriesgado experimento en donde Boyle busca rescatar y contar con un nuevo lenguaje todas las instancias clásicas: el conflicto entre el padre con derecho a rehacer su vida con una nueva mujer, los celos de sus hijos, la importancia de los valores morales y sociales por sobre el dinero (Damian diciendo que el dinero solo trae problemas) y varios niños adorables que nos asombran por su lucidez. Boyle, a su vez, muestra nuevamente su talento como musicalizador y su gran manejo de actores.
En cuanto al guión y el relato cinematográfico, destaca un notable conocimiento de la psicología infantil, capaz de rivalizar al mismo Hayao Miyazaki.
El film sin embargo sólo vale como primer experimento, se queda a mitad de camino. Se supone un film para toda la familia, pero para los niños es muy larga (¿que pasó con los films sólidos y acotados de 90 min?) y para los adultos es muy naive. Evidentemente el cine sufre un pequeño disloque entre el público y los recursos en materia de cine para toda la familia. Y Boyle también cayó en la redada. Aún así vale la pena. He dicho.
Conclusión: El dinero no hace a la felicidad.
Publicadas por Anónimo a la/s 11:35 a. m. |
jueves, noviembre 10, 2005
Wallace & Gromit: La batalla de los vegetales (Wallace & Gromit in the Curse of the Were-Rabbit)
Cuando el presupuesto no lo es todo
Hay dos enfoques posibles para abordar esta crítica. Comenzaré por el primero:
Como película para niños, la última entrega de Wallace y Gromit es entretenida, sorprendente y suficiente como para dejar a los menores satisfechos y a los mayores moderadamente felices. Punto
Segundo enfoque:
Como cuarta película de Wallace y Gromit pierde aquella simpleza fantástica que se podia ver en sus entregas anteriores, a saber "A grand day out" donde se nos presenta a un aparentemente standar señor inglés, pelado, que vive con su perro y le gusta tomar té con galletitas de agua y queso. Bastante queso. Tanto así que al quedarse sin provisiones decide buscar el lugar ideal para conseguirlo y decide ir de pic-nic a la Luna, que está hecha de queso como todo el mundo sabe. Wallace demuestra entonces que no es un señor inglés común y corriente con un perro común y corriente, ya que en su sotano guarda su último invento: una nave espacial. Ya en la Luna los protagonistas se encontrarán con una especie de cocina mecánica a monedas que sueña con viajar a la Tierra y esquiar. Segunda entrega "The Wrong Trousers", Wallace le regala a su compañero canino unos pantalones mecánicos para que lo saque a pasear, mientras que asediado por un presupuesto justo toma un inquilino: un pingüino. Su inquilino resulta ser un ladrón de joyas que ve la oportunidad en los pantalones mecánicos e incrimina a Wallace en sus fechorías. Queda entonces en el genial y mudo Gromit el trabajo de rescatar a su amigo, terminando todo en una increíble persecución en un tren de juguete donde Gromit arma el recorrido poniendo las vías mientras alcanza al pingüino. Finalmente en la tercera, "A Close Shave", metidos en el negocio de lavar ventanas, Wallace se enamora de la dueña de un local de lanas Wendolene Ramsbottom, sin saber que el perro de ella termina enredandolos en una conspiración para raptar todas las ovejas del pueblo con el objetivo de convertirlas en comida para perros. Esta última, las más graciosa de las cuatro, tiene también otra gloriosa persecución donde Wallace termina en una motito llevando encima varias ovejas.
Y qué pasa en la última?: Wallace ha encontrado la forma de explotar la obsesión del pueblo por un concurso anual de verduras gigantes armando una compañía dedicada al control de plagas, en este caso conejos. Muchos. Pero como es un hombre de buen corazón, no se deshace de las criaturitas sino que las esconde en su casa. Cuando la población conejil comienza a ser un problema, Wallace cree encontrar la solución en un aparato de control mental (bah, lavado de cerebros) en el que implantará en los conejitos su aversión a las verduras. Claro que esto sale mal y se encuentra con un conejo monstruoso (el Were-Rabbit del título) y otro mutante que agarra modismos de su personalidad. Su honor se encuentra en juego ya que la bestia arrasa con las cosechas de sus vecinos, a su vez que la organizadora del evento (y última conquista) Lady Tottington, al complicarse la situación del concurso, considera emplear las armas propuestas por el vividor Victor.
Lo que siempre sorprendió de los episodios de Wallace y Gromit más, allá de ser la animación con plastilina más sorprendente existente hasta ahora, era su capacidad de crear un mundo con un realismo mágico totalmente sencillo y creíble, credibilidad que se pierde en ésta última donde las situaciones son forzadas, la lógica mágica se disuelve y los recursos son reciclados. Es muy triste ver la repetición del recurso de la persecución en avión de "A close shave" donde Gromit con un botón transforma una parte de la moto en un avioncito para perseguír al perro enemigo, y en ésta simplemente hace volar un avión de juguete de una feria... para perseguír al perro enemigo. Las referencias a géneros como el cine B se encuentran un poco metidos con presión e innecesarios, incluso cae en clisés imperdonables en una película infantil a estas alturas: la supuesta muerte de Wallace con una extraña resurección a base de queso. Una lástima
Un tema aparte es la adaptación. Si bien no llegué a ver la copia en inglés, todas las películas anteriores las había visto en español, y en ésta última se destacan negativamente aquella idea estrafalaria de cambiar los nombres de los personajes por supuestos "equivalentes" en español, por ejemplo Victor de los Bosques por Victor Quartermaine (?) y una tal Señora Pajotes (que suena bastante mal). Otra cosa sumamente molesta es la incorporación de modismos mejicanos, ausentes en las traducciones anteriores, por ejemplo "compadre" en vez de "amigo". Resulta bastante chocante escuchar a Wallace diciendo "de pelos", lo mismo que le resultaría a la audiencia mejicana escucharlo decir "copado".
Dudo mucho que ésta película gane los premios que cosecharon las anteriores. Y con razón.
Conclusión: la película como producto infantil funciona, pero como película de Wallace y Gromit decepciona
más sobre Wallace & Gromit
Publicadas por Anita a la/s 7:24 p. m. |
sábado, octubre 29, 2005
El Aura
Momentos borgianos.
Esteban Espinosa ( Ricardo Darín) un epiléptico taxidermista con la obsesión de cometer un robo y con su vida matrimonial hecha pedazos es invitado por otro taxidermista amigo a cazar ciervos al Sur. La esposa de un tal Dietrich (Dolores Fonzi) los recibe en sus cabañas. El inexperto Espinosa mata a Dietrich por accidente en el bosque. Su amigo golpeador de mujeres (Alejandro Awada) debe regresar con urgencia a Bs. As. Dos matones llegan buscando a Dietrich. Primer momento tenso. Espinosa decide hacerse pasar por amigo de Dietrich y junto con ellos y el hermano de la esposa de Dietrich planean el robo a un casino.
El aclamado director de Nueve Reinas , Fabián Bielinsky vuelve al ruedo con un policial escrito por él. Al igual que en su antecesores se apoya en la densidad de sus guiones, en las vueltas complejas y múltiples de sus tramas y en elementos simbólicos cada vez más fuertes. Dos ideas rectoras le dan consistencia a este film. Una de ellas es la idea de aura no sólo como un momento clave de todo ataque epiléptico sino como un instante de cambio en que puede vislumbrar el paso en silencio del universo. Con un sentido muy borgiano que también le da una visión laberíntica. El aura es circular. La película es circular. El instante es eterno. Tan eterno como la duración del film.
La otra idea es el aura como ese elemento invisible que nos acompaña y nos define. Como una sombra de perro-lobo que acompaña al protagonista. Como la sombra de cuchillero de Borges.
Notable trama simbólica que se apoya en recursos y lenguaje básicos pero efectivos. Vale la pena este Aleph cinematográfico. He dicho.
Conclusión: Un momento tenso e intrigante
Publicadas por Anónimo a la/s 6:40 p. m. |
domingo, octubre 16, 2005
The edukators (Die Fetten Jahre sind vorbei)
¿Amor libre revolucionario?
¿Es posible plantear la profundidad de los clises? Este film se lo propone. Dos jóvenes Jan (Daniel Brühl ) y Peter (Stipe Erzeg) se dedican a entrar durante la noche a mansiones de millonarios y desordenarles los muebles sin robarse nada. El mensaje: Los edukadores los han visitado, ya no están seguros y no podrán seguir ignorando las graves desigualdades sociales de nuestro tiempo. Pero los muchachos también trabajan. Peter parte de vacaciones y le pide a Jan , muchacho hosco y problemático que ayude a su novia Jule a limpiar el dpto de donde ha sido desalojado.Y claro, ambos se enamoran. La chica esta hasta el cuello en deudas y convence a Jan de que ambos ejecuten la proxima misión de los Edukadores en la casa de su acreedor, un tal Hardemberg (Bhurghart Klaubert). Pero este los descubre y junto con Peter deciden secuestrarlo. La trama política se mezcla con los problemas amorosos.
El triángulo era previsible. La trama reedita y crítica la ingenua visón revolucionaria de los 60 y 70. El director realiza un notable trabajo en los primeros 40 minutos del film, incluyendo una muy lograda secuencia de títulos. Las intenciones eran buenas, pero ya se sabe que el Infierno esta tapizado de buenas intenciones. El film falla en su resolución y por momentos pierde ritmo. Los Edukadores es un film que trata de utilizar y resignifcar cliches desde un trama intimista y verosímil. Por momentos lo logra, pero al guión le falto algunas vueltas más. El director arranca con planos audaces y lenguaje rupturista y termina siendo el más clásico entre los clásicos. ¿Será como dice Hardemberg, que la revolución es sólo una etapa de la juventud y que cuando uno crece vienen las deudas, los créditos, las responsabilidades y el aburguesamiento? Así parece.
Con todo este film es recomendable. El lector podrá abandonar la sala reconciliándose con el extraño de pelo largo que todo llevamos dentro. He dicho.
Conclusión: Con las mejores intenciones
Publicadas por Anónimo a la/s 7:45 p. m. |
miércoles, octubre 12, 2005
Guardianes de la Noche (Nochnoi Dozor)
Fantasía y acción rusa
¿Qué pasaría si se cruzaran los conceptos de irrealidad de Matrix con un protagonista con características de John Constantine y un director con aspiraciones de Junet en " La Ciudad de los niños perdidos"?.
En principio un producto irregular, pero uno que vale la pena ver.
En "Guardianes de la noche" se nos presenta un pasado mítico en el cual se plantea una lucha sin fin entre el bien y el mal. El bien se encuentra liderado por el justo Boris Geser (Vladimir Menshov), capaz de llorar al ver una matanza desenfrenada. En el otro lado del ring el maquiavelico Zavulon (Victor Verzhbitski) quien se relame con el desastre. Cuando en una portentosa batalla las fuerzas contrarias lo único que losgran es anularse mutuamente, se llega a un armisticio: ninguno podrá desde entonces inclinar directamente hacia un bando o al otro a la humanidad. Para ver que ésto se cumpla las fuerzas de la luz cuentan con los "Otros", seres humanos con capacidades nada humanas que patrullarán las calles de Moscú. Así quedan conformados los Guardianes de la Noche.
Pero hay una profecía que anuncia la llegada de un "Otro" superior que será tentado por ambas partes y finalmente romperá el equilibrio con su decisión.
Nuestro protagonista, Anton Gorodetsky (Konstantin Khabensky) es un hombre común y corriente que descubre el mundo que se encuentra al filo de la realidad, y entonces se verá sumergido en un mundo de vampiros, maldiciones, conspiraciones y algún que otro subte abarrotado.
La película entonces si bien es entretenida tiene algunos problemas de ritmo irregular, junto con un director con demasiadas ganas de emular estilos ajenos sin lograr encontrar el propio. La trama es interesante, pero pareciera que algunos problemas de adaptación no fueron bien solucionados, llevando en ciertas ocasiones a confusiones innecesarias. Sin embargo es muy sólido el mundo fantástico planteado y su relación con el mundo real. Como película fantástica no se puede negar el toque novedoso que significa su origen, si bien la voz en off en inglés al principio es totalmente innecesaria.
Conclusión: Exótica
.. y hay secuela
sitio oficial
Publicadas por Anita a la/s 5:49 p. m. |
jueves, octubre 06, 2005
Tiempo de Valientes
Resucitando la extraña pareja
La nueva película del creador de "Los Simuladores" y la regular "El fondo del Mar" nos acerca la historia del psicólogo Mariano Silverstein (Diego Peretti) quien se ve obligado a cumplir una condena con trabajo comunitario, esto es brindar sus servicios en una especie de terapia ambulatoria acompañando al detective Alfredo Díaz (Luis Luque) en sus tareas diarias. Díaz presenta un trauma por el abandono de su mujer, lo cual se refleja en su trabajo. Juntos se verán involucrados en la investigación de la desaparición de un misterioso cargamento. Hasta ahí nada nuevo, pero "Tiempo de Valientes" se atreve a incursionar en un género típico del cine estadounidense logrando adaptarlo y conectarlo a situaciones fácilmente reconocibles para el espectador argentino. A partir de ahí el producto se vuelve desopilante, con más de una referencia a las películas de las que toma partido, logrando asi una comedia policial con escenas de acción muy bien realizadas, malos muy malos y buenos con sus falencias pero queribles.
La segunda película de Szifrón muestra al director más cómodo en el medio, manejando mejor los ritmos, armando personajes sólidos y creíbles y logrando un resultado más que aceptable, esto es darle al público 110 minutos de diversión bien pensada. Esta es una muestra más del cine argentino pensado para entretener, pero sin ser necesariamente bobo. Bien demuestra que existen puntos medios entre la pretensión del cine arte argentino que no supera sus aspiraciones europeas (La niña Santa y un sinfín de bodrios) y la producción vacía de contenido a cargo de un par de caras conocidas que lo único que puede aspirar es a un montón de anónimos diciendo que la vieron, sólo para salir en la tele (Papá se volvió loco, Peligrosa Obsesión y otros desperdicios de fílmico).
Conclusión: Vale la pena
para más info y trailers
Publicadas por Anita a la/s 1:19 p. m. |
miércoles, septiembre 14, 2005
Iluminados por el fuego
Interiorizando el desastre
Nací en Mayo de 1980, no tengo memoria alguna de la Guerra de las Malvinas y crecí en principio con la idea de que en algún momento, mientras era chica, hubo una guerra. En principio la primera idea asociada desde mi niñez es el feriado. Con los años también asocié la idea de muchos chicos jovenes mandados a las islas por un gobierno de facto encabezado en ese momento por un borracho. También hay monumentos a caídos, un himno, problemas diplomáticos y hombres pidiendo una colaboración en el tren.
"Iluminados por el fuego" es un film que finalmente deja dos niveles de lectura separados y en cierta forma contradictorios. Por una parte es una película bélica, que cumple con absolutamente todos los lugares comunes del género, no escatima los golpes bajos y tiene un reparto que saca adelante personajes no muy delineados lo mejor que puede. Por el otro lado es de una excelencia técnica jamás vista en el cine argentino. Más allá de sus falencias de todo tipo "Iluminados.." cumple un cometido muy loable, que se convierte en su punto fuerte, nos transporta a todos, a los que la recuerdan y principalmente a los que no, a lo que fue estar realmente en las Islas Malvinas en aquel momentos. Recrea el espanto de la guerra en el frente con una materialidad pasmosa. Lo que diferencia a ésta película bélica de otra, es que justamente es nuestra, no se trata de soldados entrenados para defender la libertad y el american way of life, sino chicos, chicos comunes muertos de frío, hambre y principalmente miedo. A través de los ojos de Esteban Leguizamón (Gastón Pauls), quien comienza a recordar su tiempo en el frente a partir del intento de suicidio de un compañero, vivimos la experiencia espantosa de una guerra marcada por la estupidez. Nuestra estupidez.
En si, como ya mencioné, esta es una película que como film presenta una factura técnica impecable en oposición a un guión inconexo y desperdiciado, cargado de bajadas de línea innecesarias y golpes bajos más que fuera de lugar, entre los que destacan la espantosa canción de Leon Gieco que se siente como una puñalada por la espalda y una falta de respeto a la audiencia. Pero como experiencia que refleja el error y horror de ésta guerra en particular, es impecable.
Conclusión: A pesar de sus errores, necesaria.
Publicadas por Anita a la/s 3:56 p. m. |
jueves, septiembre 08, 2005
La suerte está echada
Aquél impronunciable...
Hay un tipo de excluído social del cual los noticieros no se ocupan, los medios no suelen nombrar y mucho menos la gente común. Es un tipo de paria que carga con el peso de ser nunca bienvenido y siempre inombrable: el mufa. Aquel que carga con el peso de ser mufa se sabe rechazado en cualquier tipo de actividad social, y ni hablar si se trata de conseguir trabajo. El ambiente artístico es un ambiente supersticioso y a los mufa se los define rápido y se los aisla con aún mayor velocidad. Esto es lo que descubre Felipe (Marcelo Mazzarello), actor de teatro que por azar de la vida descubre que de un día para el otro tiene la capacidad de atraer la desgracia para aquellos que lo rodean. Si bien en principio todo parece ser simple mala suerte, pero al quedarse sin trabajo y correrse la voz, Felipe descubre que es posible que el destino esté en su contra. A menos que pueda encontrar una solución algo que parece no tenerla.
Guillermo (Gastón Pauls), el medio hermano de Felipe, tiene razones para sentirse desgraciado también. Un auto suena en la esquina de su departamento todas las noches y no lo deja dormír. Al llegar tarde al trabajo demasiadas veces es despedido. Y su novia lo deja. Y la empresa le paga un porcentaje importante de su indemnización en especies.
Entonces el padre de ambos, internado en un geriátrico, los junta con un último pedido estrafalario.
Rodeado de un tremendo humor negro y algunos toques dramáticos un poco intensos para el tipo de clima que se plantea, la ópera prima de Sebastián Borensztein (ya con una trayectoria marcada en la televisión), divierte y sorprende con el nivel de acidez y ciertas situaciones woodyallenescas en su absurdo que transforman a la película en un producto divertido y con momentos memorables. Si bien Marcelo Mazzarello es un poco rígido en su actuación la variedad de situaciones por las que su capacidad de imán para la mala suerte lo hacen pasar, hacen que ésto se pueda pasar por arriba sin mayores dificultades. El ritmo en general es bueno, salvo en aquellos puntos dramáticos , un poco anticlimáticos, donde la partitura de Alejandro Lerner empalaga. Por lo demás es una comedia muy divertida, con clásico cameo del director incluído, recomendable para ver entre amigos riendose un buen rato y recordando a aquél pobre mufa (todos hemos conocido alguno) tratando de no nombrarlo. Ni en el pensamiento.
Conclusión: Para reírse y tocar madera
Publicadas por Anita a la/s 2:02 p. m. |
jueves, agosto 18, 2005
La ciudad del pecado (Sin City)
..Salpica
La industria cinemátografica estadounidense cuenta en su haber con varias adaptaciones de diferentes comics, algunas más certeras que otras. Hasta ahora todas se habían basado en el comic más clásico, basado en superhéroes con diferentes poderes / trajes / traumas, pero es recién ahora que se abren del mundo de los Marvel y DC más tradicionales y se asoman a ese otro comic, con un público adulto y con contenidos totalmente diferentes que ha sido llamado "novela gráfica" y que ha revolucionado y renovado el mundo de las historietas. Uno de los mejores representantes de esa renovación es el artista y guionista Frank Miller. Una de sus obras emblemáticas es la que el guionista y director Robert Rodriguez decidió adaptar, comenzando con una excelente decisión: respetar el lenguaje visual característico de la obra y "adaptarlo" al lenguaje del cine. Para ello codirigieron juntos la película a fin de lograr una armonía entre los dos lenguajes. Y quién mejor para traducir la mancha de Miller que el "loco por los efectos" (Lucas no es el único) Robert Rodriguez, basta recordar su trilogía infantil "Mini Espías" y su cierre del mariachi con "Erase una vez en México". Más alla de la calidad de los films en sí mismos, es indiscutible que Rodriguez tiene pasión por lo visual. Y por la sangre (cuando no filma aventuras infantiles por supuesto).
Esta fusión absoluta entre el dibujo de Miller y la cámara de Rodriguez desembocan en un producto sorprendente por donde se lo mire, con una fidelidad absoluta al guión (hasta donde la adaptación cinematográfica lo permite), y un ritmo que no decae.
Y a todo esto, de qué va la película?
"La ciudad del pecado" cuenta tres historias paralelas que toman lugar en una ciudad corrupta hasta la médula, donde la violencia y la sangre están a la orden del día. En este infierno cargado de matices del policial negro nos encontramos con la historia del policía bueno (Bruce Willis) que arriesga todo para evitar que un depravado abuse de otra niña más, con el matón deforme pero de buen corazón (un resucitado Mickey Rourke) que pondrá patas para arriba a la ciudad a fin de encontrar al asesino de la única mujer que le dio una noche de amor, y finalmente a un hombre metido en una situación desesperada (Clive Owen) cuando trata de defender a su pareja de un ex novio abusivo (Benicio del Toro) y desata un incidente que podría acabar en una guerra sangrienta entre las prostitutas, la policía y los mafiosos de siempre.
Lo interesante de esta película es que logra un equilibrio entre un poderoso lenguaje visual y un guión sólido, caracteristica en peligro de extinción cuando cada vez son más los productos que se apoyan en lo visual desmereciendo la columna vertebral para el conjunto que es el guión. Como adaptación de un comic, es la única que ha logrado trasladar el lenguaje característico de la historieta al cine, respetando el carácter de la obra y logrando un producto que finalmente deja completamente satisfechos tanto a los seguidores del comic original como al público que busca un entretenimiento interesante.
Conclusión: Para no perdersela
Publicadas por Anita a la/s 12:46 p. m. |
viernes, agosto 12, 2005
Charlie y la fábrica de chocolate (Charlie and the chocolate factory)
Castigando pecados capitales infantiles
La nueva adaptación del clásico de Roald Dahl nos presenta la historia con tintes de cuento de hadas de Charlie Bucket, un chico más que pobre y más que bueno, a quien se le da la oportunidad junto con otros cuatro chicos (ya no tan buenos) de conocer la mítica y misteriosa fabrica de chocolate del extraño Willy Wonka. Cada chico representa en sí los defectos posibles en un niño. Se encuentran entonces: el goloso sin límites Augustus Gloop, Violet Beauregarde como la pequeña trepadora fruto del exitismo de su madre, el soberbio sabelotodo Mike Teavee, representante de una generación que da por sentado el conocimiento tecnológico, y finalmente la malcriada y consentida en extremo Veruca Salt, una auténtica caricatura de los extremos a los que puede llegar el egoísmo infantil. Todos ellos ingresan en la fábrica codiciando un misterioso premio final, todos menos Charlie por supuesto. Recibidos por un raro personaje quien resulta ser el dueño de la fábrica, recorrerán las instalaciones, donde cada uno sera tentado según la debilidad de su carácter. Un plus son los obreros idénticos, los clonados Oompa Loompas, cuyas coreografías son uno de los puntos más altos de la película.
La historia entretiene a chicos con su despliegue visual y la facilidad de identificación con los personajes infantiles, y a grandes con varios gags surtidos que distraen de la irrealidad un poco exesiva para el adulto promedio.
El Willy Wonka de Jhonny Depp es el mejor representante de la realización del director Tim Burton en éste film. Llama la atención, no se termina de entender y en el mejor de los casos, es correcta.
Burton se encuentra en un momento muy particular para un director. Está tratando de reinventarse a sí mismo luego de haber quemado todos sus cartuchos en "La leyenda del jinete sin cabeza". Buscando un equilibrio entre el cine comercial y su expresión indivudual, "Charlie.." comienza con un estilo típico del director, con más de una referencia a "El joven manos de tijeras", pero se pierde en la puesta visual y los efectos que varian de buenos a directamente malos. Se encuentran al principio las típicas obsesiones del director: las espirales en la puesta en escena, los personajes inadaptados, las perspectivas retorcidas que los representan, las figuras de autoridad conflictivas (y actuadas por algún pope del cine clásico de terror) y la aparición de su mujer en un papel secundario (desde Big Fish se trata de la muy británica Helena Bonham-Carter, dejando de lado a la extraña Lisa Marie), pero avanzando la historia pareciera licuarse y perder identidad. El retoque de color por algunos momentos es demasiado evidente, como en el caso de la tez tétrica de Willy Wonka que parece estar recortado todo el tiempo. Habrá que ver, en futuras películas, si encuentra el equilibrio finalmente o termina convirtiendose en una sombra de sí mismo.
Todo esto no necesariamente descalifica a la película.
Si bien se siente un poco larga, es ideal para niños (y golosos) de cualquier edad, si bien como obra del director es menor.
Conclusión: Empalagosa pero digerible
(quiero un oompa loompa)
Publicadas por Anita a la/s 1:21 p. m. |
Elsa & Fred (ídem)
Soledades encontradas
Elsa es una señora mayor, vive sola entre las visitas al médico, la sobreprotección de un hijo y los saltos financieros de otro.
Alfredo, mayor también, acaba de enviudar y se muda a un departamento junto con su perro Bonaparte y la foto de su mujer. También vive sólo, a merced de una hija controladora y de los fantasmas de la viudez.
Elsa es activa, descarada y mentirosa.
Alfredo es solitario, hipocondríaco y está deprimido.
Elsa y Alfredo son vecinos.
El sueño de toda la vida de Elsa es entrar en la Fontana di Trevi, emulando "La dolce vita". Esto dará pié a algunas de las más divertidas situaciones a lo largo del film.
Nos situamos en Madrid, pero bien podría ser cualquier ciudad, como buena comedia romántica el lugar es sólo un marco para una historia con la suficiente carga de lugares comunes como para que el espectador se identifique facilmente y pase un buen momento.
Lo que destaca a ésta comedia de otras son sus protagonistas, si bien posee todas las características típicas del género, que ellos se encuentren en la tercera edad agrega un soplo refrescante y demuestra de forma entretenida y sin golpes bajos, por más trillado que sea, que no hay edad para el amor.
La historia nos lleva por la relación de estos personajes contradictorios con varias sonrisas y una buena porción de carcajadas. Las actuaciones de la siempre excelente China Zorrilla como la tremenda Elsa y de Manuel Alexandre como el parco Alfredo son más que convincentes y se adaptan perfectamente a las diferentes situaciones que marca el ritmo de la comedia y sus pequeños toques dramáticos. Cabe destacar la perfecta simbiosis entre la comedia romantica y la profundidad de los personajes que agregan a las situaciones marcadas por el género, las propias de la edad de los protagonistas.
Conclusión: Para disfrutar sin límite de edad
Publicadas por Anita a la/s 1:19 p. m. |
domingo, agosto 07, 2005
La Caida (Der Untergang)
¿Humanizando al monstruo?
Toda buena película basada en hechos históricos debe presentar tres versiones: la real , la ficticia y la polémica. La Caída, con un genial Bruno Ganz en el papel de Hitler, narra los últimos días de la vida del Fuhrer en su bunker mientras Berlín es asediada por el ejército ruso. La historia es narrada desde el punto de vista de Traudt (su joven secretaria), y de dos generales de la Wehrmacht que intentan tener un final digno de resistencia frente al inevitable desenlace. El film, sin embargo, termina siendo muy largo y llega a caer en algunos golpes bajos innecesarios.
La visión real de los hechos es soberbia. A pesar de estar basada en la entrevista a la anciana secretaria realizada en el 2000 , evita tener un único punto de vista y se construye con la ayuda de datos sólidos sobre el interior del bunker y muestra un estudio minucioso y detallado no sólo de la personalidad de Hitler sino también de la naturaleza de los órdenes totalitarios. Impresiona el enfoque piscologista que golpea al espectador con un Hitler patético moviendo en un mapa unidades inexistentes y reclamando un contragolpe imposible contra el ejército de Zukhov. Batallas en las calles de Berlín e inclusive la última aparición pública de Hitler condecorando a los jóvenes defensores de Berlín que atacaban con bazookas a los tanques soviéticos fueron reconstruidas con notable precisión y gran realismo.
La ficticia no es tan acertada. Al relato del derrumbe , le sobrepone una trama paralela y esperanzadora de un joven que pelea en la Juventudes Hitlerianas y termina desertando y ayudando a otros a escapar. Pero esta es una innecesaria dosis de esperanza que arruina el soberbio clima descrito anteriormente. Hay también algunas imprecisiones históricas.
La versión polémica era, en cierto modo, previsible. El film se propone reflexionar acerca del clima de decadencia final y la naturaleza de las sociedades totalitarias, a través de tomar la figura de Hitler de un modo más exacto y humanizado. Pero, claro, "humanizar al monstruo" fue para algunos sectores de la crítica, el Sionismo y la opinión pública algo similar a simpatizar con el Nazismo. Cosa que la película jamás hace, pero tampoco cae en los clisés innecesarios y deformantes . Se nos muestra un Hitler humano, capaz de delirar paranoicamente de traiciones por cada lógico fracaso de un ejército falto de recursos, de gesticular maniáticamente y, lo más interesante y poco explorado por la literatura histórica y menos aún por la filmografía, el grado de alienación al que lo sometía su Estado Mayor y su círculo más íntimo, entre ellos Himmler y Goebbels. Pero también aparece un Hitler capaz de tratar con cariño y respeto a su secretaria y esposa, de ser cariñoso y juguetón con su mascota y de valorar a sus semejantes.
Theodor W. Adorno, figura central de la Escuela de Frankurt y uno de los más lúcidos críticos del III Reich (razón por la cual debió huir a Estados Unidos) , escribió allá por 1945 una tesis acerca del funcionamiento de la TV en EE.UU. (Televisión y Cultura de Masas ). Cabe volver a algunas de esas líneas en donde critica el uso de clisés ""El dictador no es más que un mal hombre, pomposo y cobarde. Parece proceder con suma estupidez; no sale a flote nada relativo a la dinámica objetiva de la dictadura. Se crea la impresión de que el totalitarismo surge de desórdenes caracterológicos en políticos ambiciosos y de que es derrocado por la honradez, el coraje y la calidez humana de aquellas figuras con que se supone que se identificará el auditorio. (..) Esto no sólo aleja toda cuestión social concreta sino que afianza la división del mundo , psicológicamente tan peligrosa, en negro (el grupo de afuera) y blanco (el grupo de adentro). (..) Más opaca y compleja se vuelve la vida moderna y más se siente tentada la gente a aferrarse desesperadamente a clisés que parecen poner algún orden en lo que de otro modo resulta incomprensible. De este modo los seres humanos no sólo pierden su auténtica capacidad de comprensión de la realidad, sino que también en última instancia, su misma capacidad para experimentar la vida puede embotarse mediante el uso constante de anteojos azules y rosados.( 2000:24-26, Ed Lunaria) Profético. Ya Adorno se manifestaba preocupado por convertir a los dictadores en figura de clisés, sin profundidad, pero, peor aún, sin ofrecer al público elementos de análisis o al menos de incomodidad para plantearse críticamente la naturaleza de los órdenes totalitarias para evitar que se repitan en el futuro. Y también para la realidad contemporánea, donde muchas veces, no se necesita una bandera con una esvástica para cometer atrocidades etnocentristas.
La Caída es , en líneas generales una película cuyos méritos cinematográficos no son tantos, pero lo audaz de su planteo los recursos que intenta movilizar, como la falta de un narrador fijo y el énfasis en el entorno por sobre las personas, hacen de ella una cita imprescindible. He dicho.
Conclusión: Adiós a los clisés, bienvenido al duro ejercicio de pensar.
Publicadas por Anónimo a la/s 7:39 p. m. |
lunes, julio 25, 2005
Madagascar (ídem)
I like to move it move it..
La última producción del estudio de animación de Dreamworks divierte. No tiene una trama complicada ni mucho menos existencialista, pero cumple en mantener a la gente en la butaca feliz y con más de alguna risotada de por medio. Y eso no es poco.
Alex el león egocéntrico, Gloria la hipopótamo despreocupada, Melman la jirafa hipocondriaca y Marty la cebra con problemas de identidad, son las estrellas mimadas del zoológico de Nueva York. Como animales criados en cautiverio, no tienen idea de lo que es el mundo afuera de las rejas. Cuando Marty cumple diez años y entra en una crisis de la mediana edad, se une en un escape pergueñado por unos pingüinos delincuentes. Tras el desastre del fallido escape los cuatro amigos junto con los pingüinos y un par de monos son deportados, es decir devueltos, hacia el Africa. El viaje se complica y terminan varados en una isla habitada por una comunidad de lemures parranderos, acosados por unos bicharrejos poco inteligentes, presumiblemente hienas, a los que llaman Foosas. Toda la situación está plagada de juegos de palabras, gags al mejor estilo cartoon, momentos desopilantes y cantidad de referencias a películas. El resultado es entretenimiento puro, del más volátil, e ideal para pasar un buen rato entre carcajadas y animación fantástica.
Para lograr óptimo resultado, por supuesto hay que ver la copia en inglés, con las excelentes voces de Ben Stiller como Alex (el pobre enfermero de "El padre de la novia"), Chris Rock como Marty (el detective Lee Butters en Arma Mortal 4), Jada Pinkett Smith como Gloria (y como Annie en Colateral y Niobe en Matrix Revolutions), y finalmente David Schwimmer como Melman (el lacónico Ross de Friends).
En conclusión: Material altamente hilarante
Publicadas por Anita a la/s 6:34 p. m. |
Batman Inicia (Batman Begins)
Más de 600.000 fanáticos servidos
Bienvenido a Mc fanservice, podemos ofrecerte una historia concebida para que vos FAN lo disfrutes, con autenticos guiños y saltos argumentales para que VOS conocedor te encuentres en tu jugo, y por supuesto quieras volver, porque acá en Mc fanservice siempre queremos... una secuela.
En el menú tenemos un millonario traumado (con novia hot de la infancia incluída), un maestro/figura paterna que lo guiará por el buen? camino, un villano declarado que hace a la vez de intento de figura antagónica, y.. un batimovil cruzado con un tanque feo. Y por lo demás, conflictos de identidad, cruces de figuras paternas, ritos iniciáticos, luchas entre alumno y maestro (una más y van...), villanos escondidos, traiciones, amores depechados, un poco de acción y una banda de sonido desastrosa.
La película cuenta cómo Bruce Wayne (Christian Bale) abandona su vida acomodada y se retira en busca de esclarecer el objetivo de su vida. En un momento de su viaje intempestivo se encuentra con un señor que dice ser parte de una organización que combate la injusticia y que puede entrenarlo. Bruce se queda un tiempo con las huestes encapuchadas de Ra's Al Ghul, y finalmente vuelve a Ciudad Gótica donde asumirá su alter ego oscuro y alternará su vida de play boy con sus cacerías nocturnas.
Luego de la impronta que manejó Tim Burton en las primeras dos películas ("Batman" y "Batman Vuelve"), totalmente destruída por Schumacher en las nefastas "Batman Eternamente" y "Batman y Robin", no era tarea fácil levantar el muerto que significaron. En manos del hábil Christopher Nolan ("Memento"), vuelve la oscuridad y el trasfondo psicológico en oposición al glam y la cuerina al por mayor de las anteriores. Si bien el trabajo del director es correcto, el guión desperdicia completamente al complejo villano que es "el espantapájaros" y su tema central del miedo, que por mucho mencionarlo no lo hace más profundo. La película tiene un punto muy débil por el que simplemente sólo puede ser disfrutada y comprendida por aquellos conocedores del cómic. Para el resto de la plebe se trata de una cinta un poco larga y sin más significación. No llega a ser entretenida, las secuencias de acción son confusas y las reflexiones de los personajes intracendentes. Con un final más que abierto, la secuela lamentablemente es inevitable.
En conclusión: ¿Quiere su combo con un villano por 50 centavos?
Publicadas por Anita a la/s 5:36 p. m. |
lunes, julio 11, 2005
Gente de Roma (Gente di Roma)
Buscando al romano promedio
Esta obra que en principio aparece catalogada como documental, y que sin embargo pasea tranquilamente por el terreno ficcional, pareciera más una serie de pequeños cortos (muy cortos) que pretenden retratar la diversividad de la vida que se da en Roma. El hilo conductor es un colectivo que pasea por diferentes lugares en su trayecto diario y que, en cada parada, nos presenta alguna situación más o menos creíble de algún personaje. Están los viejos, está el calcio (fútbol), están los bares y en teoría está la gente. El problema principal de las pequeñas historias que se presentan es que muchas veces caen en los lugares comunes y en lo esperado, sin sentirse realmente representativas, es decir, situaciones de discriminación, vejez, enfermedad, riqueza y pobreza, bien se dan en todas las ciudades. Entonces, ¿dónde está Roma?. ¿Cuál es la intención de su director/guionista Ettore Scola?.
El problema es que el entorno de por sí no define a la gente, sino es la gente la que forma a la ciudad. Las situaciones siendo tan generales, atentan contra el concepto original, si bien es cierto que en algunos casos se ve el romano, la gran mayoría son situaciones forzadas para llenar el imaginario personal del director.
Otro caso aparte es la música que suena como el principio de una lección auditiva de idioma...
Conclusión: Paseo insulso
Publicadas por Anita a la/s 7:55 p. m. |
jueves, junio 30, 2005
Melinda y Melinda (ídem)
Dividiendo la neurosis
¿Cuál es el límite entre la comedia y la tragedia?. ¿Son sólo puntos de vista de una misma situación o acaso la vida misma no es el centro de diferentes situaciones donde la diferencia entre una y otra es borrosa?. Estas son las preguntas que se plantean cuatro de esos habitantes típicos de la Nueva York de Woody Allen una noche en un café, donde un escritor de dramas y uno dedicado a las comedias deciden mostrar su punto de vista acerca de una misma situación: una mujer que interrumpe de golpe una cena importante de unos conocidos.
La premisa no es mala y quizás si el responsable hubiese tenido algunos años menos podría no sólo haber llegado a buen puerto sino además haber dicho algo realmente importante sobre el tema.
La verdad sea dicha, el Woody Allen actual no funciona. La idea de crear una película anual no es mala, sin embargo bien sabido es que siempre es preferible la calidad sobre la cantidad, y llegando casi a las 40 películas en su haber, sería hora de seriamente plantearse el retiro.
Pocos saben retirarse en gloria, y este señor no es uno de ellos. Sus últimas películas, ésta por supuesto incluída, sólo han logrado ser una repitición pobre de ideas que antaño funcionaron, pero que la repetición han vuelto obsoletas. La triste intención de renovar simplemente desde las caras y no desde el guión, sea el caso de la aburrida "La vida y todo lo demás" y de la intrascendente "Melinda & Melinda", sólo logran resaltar la falta de creatividad e empuje que caracterizan la obra de éste director en los últimos años.
La película entretiene un poco y quizás arranque algunas sonrisas en algún gag desesperado, pero nada más.
Conclusión: Obsoleta
Publicadas por Anita a la/s 4:16 p. m. |
lunes, junio 20, 2005
La casa de las dagas voladoras (Shi mian mai fu)
En un bosque de la China.....
El año pasado muchos nos sorprendimos gratamente con "Heroe" de Zhang Yimou . Hasta entonces, la filmografía de Zhang Yimou en Occidente había sido distribuida bajo el hilo conductor de dramas intimistas (Judou, Esposas y Concubinas, La Reina de Shangai entre otras). Sorprendía la versatilidad de este joven director chino, a la vez que combinaba lo último en efectos especiales de lucha con un drama histórico. Pero aún faltaba ver La Casa de las Dagas Voladoras.
Leo (Andy Lau), un joven oficial del ejército imperial busca el paradero del jefe de la casa de la Dagas Voladoras que, cual Robin Hood, roba a los ricos para distribuir a los pobres. En una casa de placer da con uno de sus miembros, la ciega Mei (Zhang Ziyi) (que a pesar de ser no vidente danza y lucha como los dioses) y la captura. Luego urde un plan para seguirla, simulando un rescate a manos de uno de sus oficiales Jin (Takeshi Kaneshiro), quien tiene fama de hábil guerrero y conquistador de mujeres: debe sacarla de la prisión y que ella los lleve a la guarida de las Dagas. Una sola cosa: no debe enamorarse de ella.
La película combina acción con drama amoroso en el marco de un ágil relato que se sostiene y anima al espectador más allá del choque cultural. Yimou muestra su evolución como director. Mantiene la trama simbólica y las ideas rectoras de su filmografía con recursos renovados. Sigue con sus laberintos chinos de paredes estrechas y espejos, pero abandona los interiores y se las arregla para lograr el mismo efecto con bosques y hasta con planos largos en exteriores. Los protagonistas siguen encerrados en esos laberintos donde abundan los espejitos chinos de pacotilla que ocultan dramas de tensión angustiante. El personaje de Mei es una de las más lúcidas representaciones de la figura mítica de la zorra, tan cara a las leyendas populares chinas. Por momentos el film adquiere cierta espectacularidad visual que recuerda a los mejores momentos de Ridley Scott. Las coreografías de lucha son soberbias, rescatando lo mejor del espíritu tradicional de los movimientos Wu-Chu con la impronta de Crounching Tiger, Hidden Dragon. Todo eso en un espléndido manejo de escenarios, montados y naturales, que recuerda la parsimonia y estilo de Akira Kurosawa, de quien el mismo Yimou se reconoce "discípulo" .
Un notable film, muy recomendable. Tanto para quienes deseen aproximarse a algunas de las más importantes tradiciones de la mitología y el saber popular de China como para aquellos que deseen seguir la interesante evolución de la obra de magnífico director chino. He dicho.
(colaboración de Butlerian_Jihad)
Conclusión: ...Una gran película me encontré
Publicadas por Anita a la/s 1:45 p. m. |
martes, junio 14, 2005
Sr. y Sra. Smith (ídem)
Porque te quiero, te aporreo
Lo que en un principio parece simplemente una película de sexo y balas, sorprende deviniendo en una comedia con más de una reflexión acerca de la convivencia matrimonia y los tires y aflojes que toda pareja transcurre para sobrevivir. La trama nos presenta a John Smith (Brad Pitt) y Jane Smith (Angelina Jolie) (una referencia al NN norteamericano John/Jane Doe) en plena sesión de terapia matrimonial con un psicólogo en off, quien nos lleva por la historia de esta pareja aparentemente aburrida en sus 5 o 6 años de matrimonio, con aires de los cincuenta en principio y poco para hablar. Tanto John, quien aparenta ser un empresario de la construcción, como Jane que pareciera ser una ingeniera en sistemas con reputación, esconden sus verdaderas identidades a su respectiva pareja: los asesinos a sueldo más peligrosos que ronden el suelo norteamericano. Como bien muestra el trailer, descubren que son contratados para matarse mutuamente. Y no hay más que eso, en principio, porque la película logra entretener de manera más que efectiva, con muy interesantes y originales entrecruzamiento de diálogos de la vida cotidiana en contextos más que hilarantes. Las referencias cinematográficas abundan, partiendo de "La guerra de los Roses", pasando por "Cuando Harry conoció a Sally", "Mentiras Verdaderas" y una brevísima referencia a "El club de la pelea".
El director Doug Liman ha traído un aire fresco al cine de acción, comenzando con la fabulosa "Identidad desconocida", donde incluye una persecución increíble en un mini destartalado. La capacidad de este director para mezclar situaciones cotidianas con impresionantes escenas de acción no decae en ésta película. Una de las mejores es, justamente, una persecución entre una "mini van" y tres bmw. El ritmo no flaquea, si bien la película podría ser un poco más corta.
En conjunto, la película entretiene y hace reír sin pretender ser más de lo que es: entretenimiento.
Conclusión: Una lección de tolerancia matrimonial
Publicadas por Anita a la/s 4:45 p. m. |
lunes, mayo 23, 2005
Episodio III, La venganza de los Sith (Episode III, Revenge of the Sith)
Tratando de cerrar todo
Tras los desastrosos Episodios I y II, George Lucas se despacha con el cierre de su precuela, sin ahorrar esfuerzos en quedar bien con todo el mundo. A los fans les muestra finalmente la aparición del villano arquetípico tan esperado, Darth Vader, y a los críticos intenta entregarles un capítulo que intenta ser algo más que un manojo de espejitos de colores envueltos en una trama inexistente. Pero por momentos falla en lo más importante, entretener al público. Recurre una vez más en el error que se manifestó en las entregas anteriores. La antigua saga se definía basicamente como un producto de entretenimiento, desgraciadamente las precuelas prometen más de lo que entregan, y salvo por momentos de desmesurado despliegue, el resto es simplemente diálogo. Este caso no es la exepción, y tras las escenas de acción, incluso entre las mismas, aparecen otras que con un gran efecto anticlimatico nos muestra a dos o más personajes dialogando. Es notable como con los años Lucas olvidó que más allá de los efectos, sin ritmo (y obviando los serios problemas del guión) la película se cae.
La primera parte de la trama nos trae nuevamente a Anakin Skywalker, que de niño generado por una aparente concepción inmaculada (caramba), ha pasado a adolescente inseguro e inestable y de ahí a joven con pinta de bomba de tiempo sacudido por un entrenamiento Jedi que lo inclina a un autocontrol que no tiene y una amante que no puede reconocer como esposa ante el mundo (no, no es la telenovela de la tarde, es Star Wars). Cuando unos sueños de un futuro negro comienzan a perturbarlo, la caída del protagonista comienza, y por supuesto eso da pié a la parte más interesante de la película. Las largas intrigas palaciegas en la república comienzan a tomar forma y desembocan en la trampa mortal que lleva a la caída de los Jedis. Antes de todo, a favor de Lucas se encuentran un par de resoluciones para la caída del protagonista que son, si bien trilladas, agradablemente violentas entre tanto romanticismo. Otra cuestión es la capacidad de poner cara de malo muy malo de Hayden Christensen (Anakin), que casi logra que olvidemos lo mal que pronuncia sus líneas. Por otro lado, quien logra un excelente trabajo es Ewan McGregor (Obi-Wan Kenobi), en una gran imitación de la inflexión y modismos del Obi-Wan de Alec Guiness. Y eso es todo.
Episodio III entretiene, como las anteriores, en su despliegue de impresionantes escenarios y batallas generadas digitalmente, pero echa agua en la formación de los personajes, en la dinámica entre los mismos, y en la pobre dirección de Lucas, quien aparentemente entretenido con los juguetes que la tecnología le permite inventar, olvida el más simple uso del montaje cinematográfico. Si bien mi opinión puede parecer elitista, es completamente justificada ya que Lucas logró muy buenos climas de diversos tipos tanto en las viejas películas como en la famosa saga de Indiana Jones. A quien fue capaz de generar notables productos de entretenimiento bien se le puede exigir que minimamente mantenga la calidad.
Conclusión: Fan Service
Publicadas por Anita a la/s 2:55 p. m. |
lunes, mayo 16, 2005
Cruzada (Kingdom of Heaven)
Snobismo hollywoodense
Hace ya un par de años, cuando vi Gladiador, me dije a mi misma que el director Ridley Scott estaba jugando con fuego, se zarandeaba temerariamente entre un mensaje metaforico a partir de la trama, y uno alegórico central que fuera vital para entender qué era lo que quería comunicar.
Más tarde vi "Hannibal", y como un adolescente en necesidad de probar sus límites, Ridley volvió a caminar por el abismo.
Predije entonces: en la proxima se cae.
Me equivoqué.
La proxima resultó ser la genial y refrescante "Matchstick Men" (conocida aca como "Los tramposos"), donde el director encontraba una armonía en su realización que hacia tiempo no se veia en su obra.
Sin embargo mi profecia erró por una pelicula.
Cruzada nos presenta al joven viudo herrero Balian, encarnado por el encasillado Orlando Bloom (sería hora de abandonar las espadas, no?), quien mientras sufre por su perdida mujer y es odiado por el pueblo, es abordado por un noble (en todo sentido, además del literal) caballero llamado Godfrey (Liam Neeson con su mejor cara de maestro Jedi). Lord Godfrey lo reconoce como único heredero y le ofrece llervarlo a un nuevo mundo, Jerusalem, donde cualquiera puede tener su tierra sin importar su origen.. aunque, obviamente él ahora tiene un título, así que las charlas de igualdad de clase son un poco innecesarias. En el camino Godfrey muere, el barco en el que viaja Balian se hunde en el medio de una tormenta, él y un caballo son los únicos sobrevivientes.. el caballo huye asustado.. pero aparece de vuelta en un oasis.. Balian aprende muy rapidamente cómo manejarse con las tramoyas políticas que lo esperan, llama notablemente la atención de la hermana del Rey de Jerusalem (casada con su enemigo automático Guy de Lusignan), se vuelve el favorito de dicho Rey, pero en su tierra es benévolo porque recuerda sus orígenes, más que suficientes con tantos años de herreria como para sacarle el jugo a sus kilómetros cuadrados de desierto y convertirlos en tierra fértil. ¿No será mucho?
Hasta acá falencias del guión, que más allá de ciertos aciertos históricos, cae en el mismo error que el director: olvidar el lenguaje en el que se está trabajando. Bien se sabe que la realidad supera a la ficción, y si bien muchos de los sucesos de la vida de Balian deben haber sucedido, cuando son bajados a nivel cinematográfico se vuelven un poco irreales. Así también la afición automática tanto de la princesa Sybilla (Eva Green y un montón de khol) y del Rey (Edward Norton y su máscara) se sustentan en el aire, la animadversión de Guy y Reynald (Brendan Gleeson) es digna de una película de Disney, donde los malos son muy malos y los buenos, más buenos aún.
Pero, aunque pareciera que sólo se encuentra un mensaje simple y directo entre tanto despliegue de producción: "la guerra es mala", Ridley Scott es un director con contenido, así que se decide a agregar profundidad al pastiche. Pero no funciona bien, porque lo hace utilizando mensajes alegóricos como pilar para el sentido de la película, mensajes que no son fáciles de decodificar y su carácter primordial para el conjunto hacen que su pérdida por el público desenboque en dos posibilidades. La primera es quedarse con el mensaje superficial y llegar a la conclusión de que el producto no es más que un simple y trillado mensaje antibélico, envuelto en varios millones de dolares. La segunda es simplemente no saber cuál era el objetivo de todo esto, porque si no entretiene y no comunica, para qué fue creado?.
Al caer finalmente al abismo Ridley Scott se hunde en la hipocresía al vender la película como un producto de acción y aventuras para atraer el público masivo y recuperar la brutal inversión, pero ofrece en realidad un producto que no es nada más que una aspiración elitista donde sólo aquel que equipare los conocimientos del director podrá entender a qué viene toda la incoherencia.
En otras épocas el director supo manejar el verdadero arte de contar un mensaje propio en la película sin que sea en detrimento de la trama, pero aparentemente la edad y el ego le están jugando en contra.
Conclusión: Caída libre
Publicadas por Anita a la/s 5:56 p. m. |
viernes, mayo 13, 2005
Conociendo a Julia (Being Julia)
Las vicisitudes de la señora Lambert
Ser Julia no es facil. Ella misma no sabe quién es.
Como actriz, es la diva principal de la escena teatral de Londres, a fines de la década del ´30. Como esposa, es la otra mitad de una pareja autodefinida como "moderna" donde la compañía es más profesional que real y las infidelidades se admiten pero en el fondo no se toleran. Como madre, sufre del principio del nido vacío al darse cuenta de que su hijo ya no la necesita tanto como cuando era más pequeño. Como amante, es la típica mujer con crisis de mediana edad que se refugia en un ventiañero, aunque puede verse venir el desastre, y no le importa. O se convence a sí misma de que no importa porque Julia es, más que nada y en el fondo de todo, actriz. Así, en cada rol (en cada Julia) irá poniendose diferentes mascaras, de comedia o tragedia según la ocasión, y se perderá entre sus diversoso papeles. Lo que se encuentra detrás de una seguidilla de actuaciones muy buenas a cargo de Anette Bening (Julia Lambert) y Jeremy Irons (Michael Gosselyn), y de una impecable reconstrucción de época, es una reflección interesante acerca del oficio del actor, y el oficio de ser mujer en un mundo de hombre, no en el sentido trillado de la frase sino literalmente. Julia es y se define a partir de su relación con los hombres, siendo la más significativa, la que tiene con su difunto profesor de actuación Jimmie Langton (Michael Gambon), quien se le aparece en momentos claves, no como fantasma, sino como reflejo de su propia mente, un autentico superyo encargado de criticar sus reacciones y sus actuaciones.
Las metáforas sobre el teatro no faltan, sin embargo dado mi pobre conocimiento, no profundizaré sobre ello.
Por lo demás la pelicula posee un ritmo agradable, se deja ver y acompaña a Julia en su universo de multiples papeles, en las tablas y en la vida.
Conclusión: Edípica
Publicadas por Anita a la/s 3:06 p. m. |
miércoles, abril 20, 2005
Oldies, Oldies!
Revisando por mi maquina encontré unos archivos anteriores a "La Caja..", los cuales voy a empezar a subir, a fin de tener todo el material a mano. A saber:
30/07/03
El Tunel del Tiempo
Una situación peculiar del cine norteamericano de los últimos meses me lleva al siguiente planteo: está muerto el cyberpunk para ésta nación?
Es más que claro que cualquier forma de expresión, trascendiendo el eterno debate arte vs. producto comercial, depende del contexto en el cual es generado. En EEUU desde el incidente del 11 de Septiembre se ha dado un notable retroceso del cine descreído del sueño americano, quebrado en su estructura, que había comenzado a asomar la cabeza hace unos años con productos tan interesantes como "Fight Club", "The Matrix" y "The Royal Tenembaun" entre otras. A partir del 11/09 nos podemos considerar en el túnel del tiempo. Destino: los años 50.
Entre los síntomas de este malestar conformista que nada le sienta bien a la industria se pueden encontrar el regreso al genero musical (Chicago), a las comedias llenas de luz de sol y cenicientas adolescentes y más maduras (Maid in Manhattan; la tristemente inminente y trillada "What a girl wants" donde una adolescente viaja a Inglaterra a conocer a su padre que, por supuesto, termina siendo millonario, en fin..). Cabe destacar el triste retorno a la estructura del héroe encarnación del sueño americano, entendido como una clonación desmedida de Superman, lo que significó en su época y su regreso en detrimento de una historia más sólida. Superman representó el héroe en su faceta más idealizada, sin fallas, sin dudas, sin sustancia. Aquel héroe que tiene la posibilidad de caer, aquél que es tentado, es siempre más creíble, más humano y más cercano al público.
Los griegos sabían lo que hacían.
El regreso de Superman se puede ver particularmente en las últimas películas de acción y en "Matrix Reloaded" en especial. El héroe que no duda, es superpoderoso y siempre llega a tiempo para salvar a Lois Lane, Trinity o la chica de turno, normalmente disminuida a un manojo suspirante sin mayor papel que el de querer sacrificarse por el héroe aunque siempre tenga que ser salvada. Todos nosotros sabemos que el bien siempre triunfará, no es así?
El cyberpunk opina lo contrario. Este género rompe con el ideal y propone situaciones oscuras con pocas probabilidades de final feliz, el héroe tiende en realidad al antihéroe y el enemigo es un sistema corrupto que sólo busca reproducirse. Todas nociones que no se llevan muy bien con el American dream. En momentos de guerra e inseguridad hay que fortalecer los lazos tradicionales y las esperanzas. El futuro será nuestro.. el héroe defenderá nuestros intereses y el mensaje marcará el camino correcto. Porque el héroe no duda y sabe que es el poseedor de la verdad absoluta y revelada...
15/10/03
Sobre Matrix Reloaded
Matrix es una gran película. Yo no soy amante del cine iraní ni del francés ni le pego al cine yankee sólo por serlo. Cuando una película es buena, lo es independiente de su origen. Qué hizo de Matriz una película que cambió los canones del cine de acción tiene una respuesta por todos conocida, la ruptura en la estética de los efectos especiales. Pero por qué le rompió la cabeza en mil pedazos a mucha gente, ya tiene una respuesta que excede lo anterior. Esta película tiene una subtrama simbólica fácilmente legible por el público, y eso le da un valor agregado difícil de igualar. Esta película apela a la mitología cristiana de una manera muy clara, junto con íconos identificables con un nivel de cultura mínimo: referencias a "Alicia en el País de las Maravillas" y "A traves del espejo", mitología griega, y de hecho utiliza la estructura del mito del héroe común a casi todas las mitologías existentes. Esto de ninguna manera pasa desapercibido. Las películas que más han tocado al público utilizan ésta estructura. Por ejemplo, la vieja trilogía de Star Wars. (resumiendo brutalmente la estructura clásica es : La Partida: negación al llamado, ayuda sobrenatural, el cruce del primer umbral, el vientre de la ballena. La Iniciación: el camino de las pruebas, el encuentro con la diosa, la mujer como tentación, la reconciliación con el padre; El Regreso: negativa al regreso, huída mágica, rescate del mundo exterior, cruce del umbral de regreso, la posesión de los dos mundos, libertad para vivir. Fijense, está todo en la primera. Fuente "El héroe de las mil caras", Joseph Campbell)
Además Matrix tocó un ser sensible en el pequeño paranoíco escondido que todos llevamos adentro, una idea muy querible para una generación descreída y con la esperanza puesta en que no hay futuro. Terreno ideal para plantar una película que representa tan bien los ideales del género Cyberpunk. En pocas palabras, el futuro es mucho más malo de lo que te podrías imaginar, tu vida no existe, sos una batería para las maquinas y si te llegás a avivar de esto estás condenado a vivir escapando del antivirus (agentes) y recordar qué buena era tu vida de mentira (recuerden al traidor, un personaje muy entendible, quién no se shockeó al ver despertar a Neo?).
Ahora, por qué Matriz Reloaded desperdicia y destruye todo lo anterior?
No notaron que el mundo real no era tan malo como lo pintaban?
Ahora hay comida, ropa más prolija, mucha más gente y hasta fiestas rave.
Es creíble un héroe que dice dudar cuando sus actos demuestran todo lo contrario?
Es creíble que el personaje de Trinity haya pasado de chica con actitud a mera sombra jadeante de Neo?
Y Morpheus? De guía espiritual a revolucionario fanático..
Esto no es evolución de personajes, es simplificación en pos de una historia sin sentido.
Y lo que más duele es la pérdida total del espíritu central de la historia, el gen cyberpunk. El futuro ya no es tan malo, el heroe duda pero es certero en su acción, la chica siempre está dispuesta a ser damisela en peligro y el final feliz siempre llega
Ahora piensen por dos segundos
No hubiera estado muchísimo mejor que Trinity se hubiera muerto y Neo se viera obligado a salvar a un mundo en el que ya no quiere estar?
Es una opinión, él como Superman o todo buen powergamer que se precie, siempre puede jugar su carta especial para salvar el día.
Ni siquiera voy a hacer referencia a la estructura mitológica entre una y otra película. Es mi humilde opinión que los conceptos de Matriz Reloaded destruyen a su predecesora y convierten todo en esto:
Fantasía geek pajera:
Hola, me llamo Thomas H. Anderson.. soy un tipo común y corriente con un trabajo de programador común y corriente.
Gran parte de mi vida la he pasado delante de una pantalla, así que no tengo mucha idea de cómo relacionarme con la gente. Incluso como inadaptado soy un fracaso y ni siquiera he logrado mi grupito de inadaptados con los cuales jugar AD&D y sentirme un poquito menos fuera de lugar.
.. ni que hablar de una novia…
la realidad apesta…
así que voy a plantear una nueva realidad según los parámetros que conozco:
me pongo un nick cool que esconda mi baja autoestima y realce la novedad que propongo. Ahora me llamo Neo y propongo una nueva realidad.
La realidad como la conocen no es real, sino un programa generado por unas computadoras futurístas apocalípticas. Como en todo soy malo, menos programar, de repente la realidad se simplifica en parámetros más que legibles para mí, y mucho más simples que la relación diaria con el resto de la humanidad…
En éste mundo, como soy un hacker muy groso, puedo hackear el programa; es decir, puedo hacer con la realidad lo que se me cante. Nadie puede hackear la realidad como yo, así que el resto de la comunidad se arrodilla ante mí. Dicen que soy el elegido. Además tengo una novia que está re fuerte..
Pero eso no es todo, les dije que vuelo como Superman, tengo fuerza como Superman, salvo a Lois.. ehh a Trinity de la muerte.. como Superman.. tengo la profundidad, capacidad de autocrítica, reflexión y expresividad de .. ehm ..Superman…?
Ahora, como las reglas de la realidad las pongo yo, cualquier malo que venga sólo sirve para demostrar qué tan bueno soy con el tecla.. peleando.. cualquier excusa es buena. Que quede bien claro que soy el elegido.. por si no lo entendieron..
Pero lo mejor de lo mejor…
Quién no tuvo una fantasía con Lara Croft?
A quién no le gustaría que hubiera una mina así?
O que ella fuera de verdad y encima estuviera caliente conmigo.. un programa curvilíneo caliente conmigo.. mm, será posible?
Claro que sí, porque yo controlo la realidad y la realidad es como yo siempre quise que fuera..
..en fin..
09/12/03
Sobre Kill Bill
La Esponja Cinéfila
Tarantino desde los principios de su trabajo ha planteado una temática clara y común a toda su obra contando historias que se caracterizan por una violencia cruda, a la que suma a partir de su trabajo como director, el contraste de los diálogos con las situaciones. En "Reservoir Dogs" (1992) se analiza una canción de Madonna antes de un asalto, en la conocida "Pulp Fiction" (1994) unos asesinos a sueldo comentan las diferencias entre los McDonald´s del mundo antes de cometer un acto sangriento.
Otra característica de sus películas es haber demostrado ser uno de los mayores exponentes del llamado "homenaje cinéfilo", lugar ambiguo entre el robo descarado y la emulación admiradora. Empezando desde el principio con la teatral "Reservoir Dogs" donde varios criminales a punto de realizar un importante asalto buscan ante todo, incluso cuando la situación se sale de sus manos, mantener su anonimato escudándose en alias de colores: Mr. White, Mr. Brown, etc. Una gran película con una gran idea ... ya utilizada en el film "The taking of Pelham One, Two, Three" (1974), donde unos criminales secuestran un vagón de una formación del subte de Manhattan con el cual pretenden cobrar un muy buen rescate. Dichos criminales mantienen su anonimato llamándose entre ellos Mr. White, Mr. Brown, etc.
Su carácter de esponja cinéfila le ha permitido reciclar tanto ideas como actores, situación que se ha convertido en una especie de firma. En un principio Tarantino se encontraba en la muy difícil situación de superar una obra altamente ruidosa e influyente como lo fue "Pulp Fiction". La subsiguiente "Jackie Brown" (1997) con su repetición mecánica de los lugares comunes del autor, es decir, el reciclaje de actores olvidados, la importancia protagónica de la banda sonora, el homenaje a un género específico del cine, los diálogos en alto contraste con situaciones casi descabelladas y sobre todo altamente violentas, mostraron un importante estancamiento del director-actor-guionista.
Pasaron unos largos cinco años hasta la llegada de su cuarta película "Kill Bill: Vol. 1".
Muchas cosas cambian en cinco años.
Una novia de blanco, embarazada y aparentemente sin nombre, es brutalmente golpeada, habla con un hombre de cara invisible y recibe un balazo en la cabeza.
Más tarde, extrañamente recuperada, lucha fieramente con otra mujer que aparenta ser una simple ama de casa. Hasta que llega la nena del colegio y mira, desconcertada, el living destruido y a su mamá y a la extraña mujer, ensangrentadas de arriba abajo, que intentan esconder sus cuchillos.
Parece una película de Tarantino, no?
Los Ángeles de Bill
Qué pasaría si los emblemáticos Ángeles de Charlie trabajaran para un mafioso llamado Bill, pudieran pelear como el trío Diaz-Barrymore-Liu, pero a su vez fueran capaces de despeinarse…
Tarantino no es impermeable a los vientos que corren. Desde su última película el cine estadounidense ha cambiado más de lo que podría parecer desde los últimos cinco años.
La penetración creciente del anime a nivel mundial, especialmente en un mercado tan hermético como el del Tío Sam, no ha pasado sin dejar su huella. La aparición de "The Matrix" (1999) cambió radicalmente el cine de acción integrando una estética particular con el uso hipercoreográfico de las artes marciales. Un sucesor directo se encuentra en "Charlie´s Angels" (2000) donde las chicas pueden desafiar las leyes de la física sin que se les corra el rimel.
"Kill Bill: Vol. 1" comienza como una película estándar de Tarantino: está la música, está la sangre, está el actor reciclado (David Carradine), pero, felizmente, no se queda en solo eso.
Progresivamente la película se deshace de ciertos elementos fetiche del director, manteniendo otros en equilibrio con la trama. Los diálogos fuera de contexto son dejados de lado por filosofía barata supuestamente oriental al mejor estilo de la serie "Kung Fu" (1972). La música sigue siendo protagónica y, aunque no deja de lado el retro encarnado en la persecución con la música de "El avispón Verde", deja lugar al pop japonés y a silencios antes difíciles de encontrar en su filmografía.
Tarantino absorbe la nueva situación del cine, lo utiliza sin perder su estilo característico y a su vez lo renueva. Mantiene el retro pero incorpora las nuevas temáticas y el revaival oriental, mezclando exitosamente las peleas acrobáticas del cine de artes marciales clásico chino con un segmento de anime, agregándole su distintiva violencia.
Tarantino se sabe un autor fetichista, y lo demuestra una vez más aunque redirecciona su capacidad de absorción hacia un producto que destila fetiches televisivos, tanto en la cita a los terribles klingon de "Star Trek", como la notable influencia de "Los Ángeles de Charlie", "El Avispón Verde" con su música y los 88 Katos, la filosofía del pequeño saltamontes de "Kung Fu" y la perversa colegiala japonesa inevitable del anime.
Tarantino ha comenzado a salir del pozo producido por un éxito demasiado grande, manteniendo y renovando sus temas, logrando un producto auténtico y encaminado hacia su madurez creativa.
Publicadas por Anita a la/s 12:10 p. m. |
sábado, abril 16, 2005
La caja en Mardel (aporte del columnista invitado)
Produciendo una devolución convincente del paseo por el último Festival de Cine de Mar de Plata, les presento al columnista:
Tokio Fist, de Shynia Tsukamoto
Una película japonesa que se apoya en un grotesco casi gore para expresar una crítica contra la vida en las grandes ciudades y nos trae un conflicto entre un pendenciero boxeador, un pelele vendedor de seguros antiguo amigo de este y su reprimida esposa.
La trama giraría en torno a los celos y ella termina yéndose con el boxeador pero no para vivir un tórrido romance sino para iniciar un camino de automutilación, mientras su marido se entrena para matar a su antiguo amigo. Mucha sangre, rostros deformados por los golpes, un martilleo constante y planos largos de gigantescas torres de departamentos conjuntamente con estaciones de trenes y subtes. Todo tiende a expresar el potencial de violencia y autodestrucción que generan las vida en las grandes ciudades y la idea siempre oriental de equilibrio.
Mientras el boxeador no tienen alma el vendedor no tiene cuerpo.
Es muy fácil decir que la distancia cultural nos llevaría a pensar que lo gore es exagerado. Bj no cree que sea así. La película abusa del espectacularismo. Pierde ritmo por momentos y no termina de convencer.
Conclusión: Reclamo al juez por golpe bajo
Tin Tin et moi, de Anders Hogsbro Ostergaard
Quizás el mayor desafío de hacer un documental sobre un comic tan mundialmente famoso como Tintin es evitar los extremos. Ni una obra críptica que sólo los fanáticos puedan entender, ni una descripción vaga para no iniciados. Es importante lograr un equilibrio máxime si se trata de Hergé, una leyenda del comic junto a nombres como los de Jack Kirby, Charles Schultz, u Osamu Tezuka.
Este equilibrio se logra en este film danes que combina las confesiones más profundas de su autor en relación a temas espinoso como su inclinación fascista y su misoginia, un análisis no demasiado técnico del estilo de dibujo llamado trazo fino e información general para el no iniciado sobre este tierno personaje naive de la historieta mundial.
Aún para aquel que no leyó mucho de Tintin ni leerá, (como su servidor), no deja de ser una extraordinaria muestra de los múltipes factores sociales y personales que influyen en la creación de una obra.
Si bien existen algunas películas animadas de nuestro héroe como Tintin and the Mystery of the Golden Fleece (1961); Tintin and the Blue Oranges (1964); Tintin and the Temple of the Sun (1969)y Tintin and the Lake of Sharks (1971), es destacable que el film no echa mano a ninguna de las imágenes limitándose sólo a presentar una animación en Flash del entrevistado Herge, y tridimensiones de capturas del comic. Y es que no hay porque mezclar ambos lenguajes innecesariamente.
Conclusión: Una sana excursión por el universo no tan inocente de Tintin
Angel on the right (Fararishtay kifti rost), de Dejamshed Usmonov
La perla de este festival de cine fue como en muchos casos el fetiche exótico que convoca al snobismo de los participantes. En este caso se trató del cine de Asia Central (región denominada genéricamente como Kazajstán por las autoridades de la antigua URSS, pero que en realidad se particionó bastante pacíficamente en varios estados todos ellos primos y de confesión religiosa islámica). Así Bj presenció la película Angel on my right hecha en Tajhstán.
Se dice que tenemos dos ángeles. Uno en nuestra derecha que anota las obras buenas y uno en nuestra izquierda que da cuenta de las malas. Hamro vuelve a su aldea natal escapando de deudas con la mafia rusa en Moscú. Encuentra a su madre moribunda que le pide que utilice sus restantes ahorros para mejorar su casa. Hamro lo hace sólo para descubrir que su madre fingía la enfermedad y ahora ha multiplicado sus deudas en su pueblo natal, sumadas a las que ya tenía, y además, tiene que aceptar una paternidad dudosa de un muy convincente niño. Sólo un milagro podrá salvarle.
Ágil comedia con tono costumbrista, a medio camino entre el realismo mágico de García Márquez y las operetas italianas. Un retrato soberbio de un mosaico cultural en donde el mundo religioso y la decadente administración de la transición comunista se entremezclan de forma eficaz. Atrapa al espectador tanto por sus situaciones como por lo convincente de sus actuaciones. El final, que no adelantaré, es una obra maestra de la composición.
Conclusión: Anoten esta película en el libro del ángel de la derecha.
Saludos
Butlerian Jihad
Publicadas por Anita a la/s 4:07 p. m. |
lunes, abril 11, 2005
Amor Eterno (Un long dimanche de fiançailles, A very long engagement)
Poesía visual
La guerra es sangrienta. Es borrosa. Es confusa.
En la guerra muchas veces aquellos que viven están muertos, y aquellos que están muertos viven. Quien está convencida de esto es Mathilde, quien moverá cielo y tierra para conseguir la confirmación de que su prometido Manech está muerto.. o vivo.
Amor Eterno es la nueva película del director francés Jean-Pierre Jeunet, creador de la reconocida "Amelie" y las oscuras "Delicatessen" y "La ciudad de los niños perdidos". Su visión es muy particular. El crea mundos parecidos a los cuentos de hadas, pero los originales, los que podían tanto asombrar como espantar. En su nueva criatura, la Primera Guerra Mundial es retratada de forma cruda y altamente humana, con un realismo seco y gris, sin perder los personajes caricaturescos que son su marca. En contraste, el mundo de Mathilde es cálido.
Para Mathilde, Jeunet vuelve a utilizar a Audrey Tautou, una decisión peligrosa por el peso de "Amelié" y lo inevitable de las comparaciones. Mathilde se dibuja como un negativo de Amelie, pero con algunos puntos en común. Aquel punto en común es la fe ciega de Mathilde, más allá de su amargura, apoyada en una serie de simpáticas supersticiones.
La trama toma la forma de un rompecabezas, donde las piezas se distribuyen en una serie de testimonios que la protagonista va buscando para conocer la verdad acerca de su prometido. Puede ser un poco complicada de seguir, pero el viaje vale la pena.
Conclusión: Mágica
Publicadas por Anita a la/s 4:30 p. m. |
Entre copas (Sideways)
Crisis de la mediana edad regada con buen vino
Miles (Paul Giamatti) un pelado y amargado profesor de literatura de secundaria con frustradas aspiraciones a escritor, se escapa en un viaje de fin de semana con Jack (Thomas Haden Church) su amigo actor, mayormente en voces en off, con aspiraciones de tarde o temprano conseguir un buen papel. La consigna es disfrutar los úlitmos días de libertad antes del casamiento del último, pasarla bien y degustar vinos por los viñedos de California. O por lo menos eso es lo que planea Miles, porque Jack tiene otras ideas.
Egoísmos infantiles, borracheras legendarias y la creciente dificultad de relacionarse conforme pasan los años son algunos de los temas que toca esta comedia dramática donde las aventuras y desventuras de la dupla protagonista juega permanentemente con el "Sideways" de título original. Con ritmo muchas veces rozando la "sitcom", la película nos pasea por las simplicidades complejas del carácter de Miles y Jack y la única constante en la vida de los dos: su amistad.
Cuando dos señoritas ingresan en la historia, el conflicto se dispara junto con la posibilidad de tomar la decisión de seguír por el camino que ya se tiene adelante, o tomar por la tangente.
Esta es una película de diálogos, imágenes y musica. Para pasar un rato con las frustraciones y alegrías (mayormente alcohólicas) de Miles y Jack hay que estar listo tanto para la risa sincera como para la sonrisa incómoda.
La actuaciones son correctas y naturales, convencen en sus personajes y se llevan armónicamente con el guión que sabe cuándo cortar la historia para que no caiga en lo previsible.
Conclusión: Salud!
Publicadas por Anita a la/s 4:27 p. m. |